Hoy he comido en Zaranda a mediodía. Está en Eduardo Dato número 5, al lado de la Plaza Chamberí. El menú ha estado muy bien, con paté y snacks nada más llegar (aceitunas, nueces de macadamia, plátano macho frito, degustación de aceite y sal...etc). Luego hemos probado el gazpacho de tomates verdes con navajas, muy refrescante, y más tarde un arroz con liebre y frijoles...y tambien una ensalada de variedades de tomate con ahumados. El arroz tenía un sabor potente y la ensalada era jugosa, con diferentes tipos de tomate. De plato principal, el buey, que estaba como caramelizado y muy tierno. Nos ha gustado mucho. De pre-postre una panacota al jenjibre con fruta de la pasión seguida de una tartaleta de manzana con helado de jenjibre. Por ponerle un "pero", mucho jenjibre a los postres ¿no?. El vino que hemos tomado ha sido un Jumilla, Altos de Luzón 2004, muy bueno, servido en copas Riedel. Con los cafés nos han traido una bandejita espectacular de "pequeña repostería". El servicio ha estado bien, siempre atento a que no faltara vino y agua. Nos ha parecido estupendo y con un precio muy ajustado, para ser un restaurante de estrella michelín. 60 euros por cabeza.....o cabezón ¡¡¡.
Hijo mío, que siempre me pongo a fisgar tu blog con el estómago vacío y he dejado el teclado empapao de jugos gástricos...¡Que bien viven algunos!
ResponderEliminarYa me dirás si con la que esta cayendo este es un ejemplo para amigos y compañeros. Una estrella Michelín, 60 euros... y el menú de tripón que no te pega para nada. Bueno, solo digo esto porque quien hacia pinitos para convertirse en redactor gastronómico era servidor. Compruebo que corre el escalafón pero... hay que intentar transmitir mas sabores, olores y colores. En fín, más que nada para que no se note por dónde asaltan los kilos jajajajaja
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